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“El dolor es parte de la vida, pero no la define”: Varinia Roa Fonseca y su novela Ambrosia y los hijos de la noche
En Ambrosia y los hijos de la noche, la escritora Varinia Roa Fonseca presenta una historia conmovedora y profunda que explora el dolor humano, el perdón y la resiliencia.
La autora revela los orígenes de su novela, inspirada en historias reales de juventud, pérdida y redención. A través de Ambrosia, su protagonista, una mujer joven y decidida, Varinia nos invita a reflexionar sobre cómo enfrentamos las heridas del pasado para encontrar un propósito en medio de la adversidad.

¿En qué te inspiraste para crear Ambrosia y los hijos de la noche?
«Me inspiré en tres sucesos que ocurrieron, dos de los cuales fui testigo lector, es decir, salieron en las noticias y conmocionaron a la ciudad. Y como todo suceso mediático, es como un fuego artificial. Uno estalla, lo ve y después pasa y te olvidas y continúas en tu rutina. Y a mí me quedaron, así como dando vuelta. Y un tercero que me lo contó una amiga de otro país que había sucedido en su tierra natal. Esa similitud entre las historias me pareció un punto importante para crear una ficción. Me demoré dos años y medio en poder hilar esta ficción que me parece a mí que es entretenida, interesante, novedosa.»
¿Cuál es el punto común de esas historias?
«Ese punto de reunión es el dolor juvenil, llamémoslo así, la ansiedad por experimentar una vida que no saben por qué está ocurriendo en sus propias existencias, pero que tienen que avanzar. Y muchas veces, por una falta de amor explícito, empezamos a cometer ciertos errores en nuestra vida que creemos que nos pertenece, pero que esos errores al final van a siempre perjudicar a otros.»
Hablemos de la protagonista. ¿Cómo es Ambrosia?
«Ambrosia es una mujer profesional, joven, de cerca de 30 años, que decide venir a vivir a nuestro país después de estar afuera gran parte de su juventud y adolescencia. Decide venirse por gratitud una vez que terminan todos sus vínculos afectivos en el país donde ella reside por muchos años. Y en esta gratitud viene con una idea de devolver la mano hacia la infancia como ella lo había experimentado siendo niña. Cuando llega al hospital… es una mujer decidida, apasionada. Nada atrevida, pero también ella es una mujer muy solitaria porque las marcas de su rostro le han dado una esperanza de vida, por un lado, pero también le han dicho que ella al parecer está sola y nadie la va a tomar en serio por las marcas de la vida.»
¿Qué nos puedes decir de los jóvenes que ella encuentra?
«Son jóvenes con vidas inconclusas. Al menos ella tiene un propósito en la vida. Sabe lo que quiere, cómo para dónde apuntar los recursos y la experiencia o la herida de guerra que tiene en su rostro. Sabe hacia dónde dirigir eso y ya no hay resentir en su experiencia de vida. Sin embargo, estos jóvenes están en la mitad del camino donde ella estuvo alguna vez. Muchos de ellos no solo no han experimentado un amor saludable de parte de su familia, sino que, por el contrario, han tenido la experiencia concreta de cualquier tipo de abuso, maltrato, abandono, rechazo. Y ella ya ha logrado entender que se puede vivir con eso. Se puede caminar por eso en la vida y no por eso perder la alegría de vivir.»
¿Y los adultos que aparecen en la novela?
«Los más adultos que Ambrosia son como ocho adultos que salen en esta novela. Son adultos que también están resolviendo sus propias historias de adultos. Están algunos a punto de jubilarse de su trabajo e implica que tienen que responderse qué van a hacer ahora con sus existencias y con su experiencia de vida. Y otros necesitan el reconocimiento de la sociedad, de su trabajo, que parece un trabajo muy invisible, pero que sin ellos tampoco las dinámicas sociales podrían ejecutarse de esta manera tan particular.»
¿Cómo se aborda el perdón en la novela?
«El perdón se establece, en primer lugar, en el reconocimiento de que vamos a transitar a lo largo de las existencias, de manera voluntaria e involuntaria, por periodos de dolor. De manera involuntaria, porque en mi familia o en mi trabajo o con mis amigos, en algún momento voy a vivir rechazo, abandono, burla, que también le llamamos escarnio. Eso lo voy a vivir, eso me va a marcar y yo también, a lo mejor, lo voy a generar. Nos hace entender que somos limitados.
Aunque nos vaya muy bien en la vida, seguimos siendo limitados. Y en esa limitación es que tenemos que reconocer que nos equivocamos. Y hacemos daño porque en general vamos por la vida siempre planteándonos desde la víctima, desde lo que a mí me hicieron, desde lo que yo viví. Pero nos olvidamos que por el camino de la vida siempre vamos estableciendo relaciones. Entonces el perdón es reconocer eso. Primero que somos limitados y en esa limitación vamos a tropezarnos y vamos a hacer tropezar a otros.»
¿Por qué recomendarías leer Ambrosia y los hijos de la noche?
«Me gusta Ambrosia, es un nombre con tanto carácter y además es suave y dinámico, y los hijos de la noche tienen que ver con eso: que en la oscuridad nos podemos tropezar, pero tenemos que atravesar la noche para descubrir el día. Es una novela entretenida, fácil de leer y es ideal para los que están en la playa, los que están en el campo, los que se van una tarde al río. Y si tú no has querido salir a ninguna parte para estar en tu casa con un té, si quieres un té helado o un té caliente, leyéndola de a poco. Como favor personal, cuando la termines de leer, compártela con otros, porque aquí hay cosas y experiencias humanas y somos los humanos los que tenemos capacidad de leer y compartir.»
¡No te pierdas Ambrosia y los hijos de la noche!
Embárcate en esta conmovedora historia que aborda el dolor, el perdón y la fuerza para seguir adelante. Acompaña a Ambrosia y descubre por qué esta novela está tocando corazones.

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